Polvos de sol - info. para principiantes

Cuando publiqué la entrada en la que os informaba del regalo de la revista Glamour de abril, algunas me pedíais una entrada sobre los polvos de sol en la que explicase cómo utilizarlos. Pues bien, aquí estoy :)

No es que me aplique polvos de sol muy a menudo porque estar blanquita no me importa, de hecho, me gusta. Aunque mi piel no es de un blanco perfecto (ojalá), más bien es translúcida, jaja, se me ven venas azules por todas partes. Igual soy una princesa... *O*  jaja.

Información para principiantes:

¿Qué son los polvos de sol?

Los polvos de sol o polvos bronceadores son unos polvos compactos de un color más oscuro que nuestra piel (un marroncillo terracota). Los hay mates, los hay nacarados y los hay con mucho brillo (normalmente dorado).

¿Para qué se utilizan?

• Contornear la forma de nuestra cara.
• Dar aspecto de moreno.

¿Cómo aplicarlos?

Coge muy poca cantidad (es mejor ir poco a poco que parecer un conguito) con una brocha tupida grande (puedes usar la de los polvos antibrillos, la del colorete... yo uso una kabuki). Aplica los polvos en forma de 3 a los lados de la cara: empieza en la frente haciendo un arco hacia el bajo del pómulo y después otro arco hacia el maxilar.
El iluminador (en crema o polvos) es todo lo contrario: es más claro que nuestra piel y se aplica en los puntos de luz del rostro (centro de la frente, pómulos y barbilla, podemos aplicarlo también en la línea de la nariz para hacerla más fina y en el arco de cupido para agrandar los labios).

Consejos:

• A mí, personalmente me gustan los polvos de sol nacarados (ni mates ni “purpurinosos”).
• No compres los polvos sin antes probarlos. Pásate por la tienda y prueba hasta que encuentres uno que te guste.
• Ten cuidado con el contraste rostro-cuello. No te pases con la cantidad y difumina muy bien.
• Creo que no hace falta decirlo, pero por si acaso: si eres blanca, no escojas el más oscuro.
• Los polvos con brillo dorado va bien para resaltar la piel de las personas morenas, no tanto para las pieles claras (en este caso, es mejor escoger unos polvos más discretos).

Anécdota:

Ahora uso unos polvos de sol de un estuche de Astor que tengo desde hace mucho tiempo (está descatalogado). Cuando me lo regalaron (era adolescente) pensé "jo, siempre ponen este color tan oscuro en todos los estuches, no puedo usarlo porque soy blanca" y claro, pensaba que eran polvos de toda la vida, de esos que se echan después de la base. Ahora sé que son los polvos de sol, jaja, qué cosas.

Nota:
Perdonad el estropicio que hice con las fotos. Quería explicarlo con imágenes. Espero que se entienda bien.